El 92% sigue enviando mensajes de texto cuando está de vacaciones. El 29% reconoce hacerlo mientras maneja, y el 6% usó esa vía de comunicación para terminar una relación amorosa. La mayoría los prefiere a una llamada telefónica.
Los datos son contundentes: el 89% de los usuarios de teléfonos celulares prefiere mandar mensajes de textos antes que llamar. Nueve de cada diez argentinos son fanáticos de los SMS. Es la vía de comunicación más popular de América Latina, según una encuesta hecha durante el mes de junio por la consultora Braun Research. Testearon a 1.003 personas en la Argentina, Brasil, México y Venezuela, a pedido de la empresa de celulares Nokia.
El 81% de los argentinos no para de mandar mensajes de texto ni siquiera cuando está en el baño. “Me encanta mandar un texto mientras estoy sentado en el inodoro”, dijo Francisco Rouch, de 14 años.
El 92% no descansa ni en las vacaciones. “No me logro desconectar. Cuando voy a algún lugar que no tiene señal me enloquezco”, explicó Daniela Paz.
Una cena de amor con velas incluidas no es impedimento para mandar un mensajito: el 50% de los entrevistados mandó un SMS en esa situación, publica Crítica.
El 6% de los argentinos cortó a una pareja por mensaje de texto. Rodrigo estaba de novio desde hacía cuatro años. “Estábamos mal. Un día de locura decidí seguirla. Se encontró en Parque Centenario con un pibe. Empezaron a los besos. Yo estaba a unos metros. El pibe en un momento se aleja de mi novia, y ella me manda un mensaje de texto a mí: ‘Estoy confundida sobre nosotros, necesito tiempo. Quedate tranquilo que te llamo’. No lo podía creer”, dijo.
Según el estudio, el 46% de los latinoamericanos manda e-mails o SMS vía celular mientras mira una película. El 29% de los argentinos reconoció haber enviado un mensaje mientras manejaba. “Trato de no mandar mensajes de texto porque me desconcentro y el tráfico en Buenos Aires es un caos. Pero a veces, cuando freno en un semáforo, mando”, admitió Cristián Casas.
Antes ir al baño era un buen lugar para leer un libro u hojear una revista de chimentos. El estudio reveló que el 81% de los argentinos mandan mensajes hasta cuando van al baño. Francisco es un caso típico. No se desprende de su celular. “Cuando voy al baño me siento más cómodo, y me divierto mandándoles mensajes a mis amigos”, dijo. Francisco no es el único. Mario tiene 32 y la misma manía: “Mando mensajes todo el tiempo, hasta cuando me estoy bañando. El celu se me llena de vapor y ya tuve que cambiar un par”, admitió.
Más de la mitad de los latinoamericanos prefieren para comunicarse distintas redes sociales, a acceder vía teléfono celular. El anterior jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman, despidió a su cercana ministra de Derechos Humanos y Sociales, Gabriela Cerruti, vía SMS: “Lo siento, le pedí a Omar Abboud que se hiciera cargo del ministerio”, decía el mensaje. (Crítica de la Argentina)
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